El comportamiento hiperactivo incluye una actividad constante, tendencia a distraerse fácilmente, impulsividad, incapacidad para concentrarse, agresividad, y comportamientos similares. Es bastante característico la inquietud o movimiento constante.
El TDA o trastorno de déficit de atención cumple tan solo en los síntomas de falta de atención sin síntomas de hiperactividad
y de impulsividad. En edades tempranas al contrario de los niños hiperactivos estos niños suelen ser lentos y tranquilos
siendo más frecuente en niñas.
Es un trastorno difícil de detectar debido a que el comportamiento pasa más desapercibido que la hiperactividad. En edades
adolescentes pueden causar episodios de ansiedad.
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es una afección crónica que afecta en edades tempranas y a menudo continúa en la edad adulta.
El Trastorno de hiperactividad y déficit de atención incluye una combinación de problemas persistentes, tales como dificultad para mantener la atención,
hiperactividad e impulsividad
Los niños con TDAH también pueden tener dificultades con la baja autoestima, las relaciones problemáticas y el bajo rendimiento escolar.
La familia es un sistema constituído por afectos y representaciones entre sus miembros.Cada miembro se ve reflejado en las miradas del
otro y las compara con las miradas hacia los otros miembros. Cada miembro familiar se hace también una representación del mundo interno
de los otros. Siendo tanto lo que los hijos esperan de los padres, y lo que los padres esperan de los hijos, se entiende ahora que los
trastornos emocionales de uno de los miembros refleja interacciones afectivas del resto de los miembros de la familia.
La detección y el saneamiento de estas interacciones constituye la justificación y el objetivo de la terapia familiar que utilizamos de
manera habitual en los trastornos que afectan a los más jóvenes o donde se dan problemas de inmadurez conductual.